A la mañana siguiente me asomé a la ventana y vi que había diluviado, pensé, MIERDA! Jolines somos los novios-viajeros de la lluvia!!
A pesar de ello quisimos seguir con los planes, ir al Atomium, al Laeken (Los jardines reales) y el Mini-Europe. También queríamos terminar de ver el museo, si nos daba tiempo.
Fuimos al Atomium y nos llovió más, entramos para ver si mientras paraba de llover, paró mientras estábamos dentro y cuando salimos nos cayó un chaparrón de muy señor mio!! Las bailarinas empapadas, por dentro y por fuera, los vaqueros mojados hasta las rodillas, caladita de frío y con ganas de llorar, adiós jardines reales!
Ni siquiera los vimos de lejos... ni el Mini-Europe, ya que no era plan de pagar 13€ por cabeza para ver los edificios emblemáticos europeos mojados... Ni al museo, ya que estabamos muy lejos y no nos daba tiempo...Volvimos a comprar para la comida y nos preparamos para coger el vuelo, como estábamos mojados, nos fuimos al Gare du Midi, para esperar al bus que nos llevase al aeropuerto.
Como habíamos alquilado un coche para Milán, solo dos días e íbamos a estar tres, antes de subir al autobús entramos a la empresa del alquiler de coche para cambiar la reserva y cogerla en el aeropuerto de llegada. El hombre, muy amable, nos atiende en castellano, nos pide los billetes del vuelo para asegurarnos que "cuando bajemos del avión cojamos el coche".
Cogemos el bus y llegamos al aeropuerto, solo llevábamos equipaje de mano. A mi chico le vacían la mochila con todo, solo por mi cartera, casi le rompen la PSP y lo tratan como un delincuente por un acuarius olvidado en la mochila. En mi maleta iban dos atomiums de recuerdo y casi se quedan de recuerdo para los de seguridad porque uno de ellos no quería pasarlos, al final la chica que me cachea porque suena el botón del pantalón les dice que es un recuerdo y a duras penas nos lo pasan.
Mal empieza...
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