Llegada a Milán

Pasados los trámites en el aeropuerto cogemos el vuelo y a la llegada a Milán empieza de nuevo el calvario...

El señor tan amable de la empresa de alquiler de coches, nos alquila el coche en otro aeropuerto y como ya lo hemos pagado, pues no podemos hacer nada, si queremos coger un opel corsa debemos pagar (a parte de lo pagado) casi 300€ más, vamos unos 400€ por tres días de coche. Y esos 300€ de más eran "sólo de tasas de aeropuerto" y el chico nos dice que nos sale más a cuenta ir al aeropuerto donde el señor amable de Bruselas nos ha alquilado el coche. Solo dos horas de viaje y casi 40€ menos en el bolsillo por la tontería!!

Vamos a por el coche y nos lo dan, ya son más de las 12 de la noche. Vamos de vuelta a Milán y en un sitio de los que para pasar el coche tienes que pagar (no recuerdo el nombre) pasamos la tarjeta y dice que no la lee, así que nos multan!

Mi chico lleva un cabreo que no puede con él y al ver la multa se acuerda de todo!

Como no habíamos cenado, al llegar a Milán, paramos en un kebab y allí nos indicaron como llegar al hotel, llegamos y eso parecía una broma macabra, un portal sucio y que olía a meado, donde la gente iba gritando, (ya eran las dos de la madrugada) y mi chico sube antes para comprobar que es allí el hotel y que tenemos la reserva, un hombre con mala gana le responde y le dice que es allí.

Baja mi chico y mi recoge, me dice que no me asuste y subimos, el ascensor era del jurásico y cuando subimos con conseguimos salir, bajamos de nuevo y subimos andando, el hotel que hay debajo del nuestro parece un puticlub y rezo para que no sea el nuestro, subimos un piso más, respiro aliviada y nos recibe un hombre con mala gana y nos pide la documentación y se la queda! Nos da las llaves y de camino a la habitación se lo digo a mi chico, dice que ahora no va, que por la mañana se lo pedimos.

Tocamos la cama y es dura como una piedra, nos acostamos y no podemos dormir, mi chico quiere que nos vayamos, yo también, pero no se lo digo.

A ver si el viaje mejora...